Cuando hablamos de la niñez y adolescencia en movimiento, nos referimos a personas menores de 18 años que han dejado su lugar de nacimiento u origen y se han trasladado a otro lugar. Las niñas, niños y adolescentes refugiados y/o migrantes son especialmente propensos a la vulnerabilidad debido a su edad y situación de movilidad. En este blog, te explicaremos el contexto actual en la región, los principios fundamentales que los protegen y cómo puedes brindar apoyo.
¿Qué pasa con la niñez y la adolescencia en movimiento de América Latina y el Caribe (ALC)?
En las últimas décadas, ALC han experimentado importantes movimientos migratorios tanto a nivel regional como extrarregional. Las principales causas de la decisión de migrar en ALC están ligadas a las desigualdades económicas, falta de acceso a servicios básicos como: salud, educación, alimentación, vivienda; violencia en todas sus formas, fenómenos climáticos, entre otros.
Estados Unidos y Europa siguen siendo los principales destinos de las personas en movimiento de ALC; sin embargo, en los últimos diez años hay una ola de migrantes interregionales que se ha incrementado por toda la región y, debido a su magnitud y desafíos, es considerada una de las crisis migratorias globales más grandes de los últimos años.
Niñas, niños y adolescentes representan entre el 20 y el 25% de las personas refugiadas y/o migrantes en la región. Ser una niña, niño o adolescente en movimiento aumenta las probabilidades de sufrir vulneraciones debido a múltiples factores como:
- Malnutrición y deshidratación: La falta de recursos y acceso a una alimentación sana y agua apta para el consumo humano pone en riesgo la salud y desarrollo de las niñas, niños y adolescentes en movimiento.
- Movilización sin acompañamiento o separados de sus familias: Niñas, niños o adolescentes en movimiento corren peligro de sufrir violencia, abandono, reclutamiento forzoso, trabajo y explotación laboral, abuso y explotación sexual, entre otros. Estos riesgos aumentan cuando se trata de niñas, niños o adolescentes sin la compañía de sus padres o tutores legales y/o están separados de sus familias.
- Distancias largas y desconocidas: La mayoría de niñas, niños y adolescentes, inclusive adultos, en movimiento desconocen las distancias que deben recorrer y los peligros que pueden encontrar en su camino.
- Falta de acceso a servicios básicos: Salud, educación y vivienda son algunos de los servicios a los que las niñas, niños y adolescentes en movimiento no pueden acceder por la condición en la que se encuentran.
Por estos y otros motivos, las niñas, niños y adolescentes en movimiento deben ser cuidados y protegidos en todo momento.
Derechos de la Niñez y Adolescencia en movimiento
Los derechos de las niñas, niños y adolescentes en movimiento son los mismos que se aplican a todos sus pares, y que están consagrados en la Declaración Universal de Derechos Humanos y la Declaración de Derechos del Niño. Deben considerarse los siguiente principios y derechos, especialmente cuando las niñas y niños se enfrentan a situaciones de discriminación y exclusión.
¿Cómo proteger a la niñez y adolescencia migrante?
Reconocer sus necesidades: Es esencial que los Estados y organismos responsables de su protección y bienestar identifiquen las circunstancias específicas en las que se encuentran las niñas, niños y adolescentes en contexto de movilidad humana, ya sea si están solos o con sus familias y si enfrentan amenazas.
Procedimientos Justos: Los países deben tomar decisiones relacionadas con la niñez y adolescencia en movimiento de manera justa. Las niñas, niños y adolescentes deben contar con representación legal y apoyo si no hablan el idioma del país de tránsito o destino. Además, las decisiones deben ser rápidas debido a la vulnerabilidad de este grupo.
Medidas Especiales: Se deben implementar medidas especiales para proteger a las niñas, niños y adolescentes en movimiento, considerando su situación particular. Esto incluye acceso a servicios de cuidado infantil, apoyo en salud mental y emocional, y la creación de lugares seguros para ellos.
Inversión en capacidades: Es importante destinar recursos económicos, logísticos y técnicos para cubrir las necesidades de la niñez y adolescencia en movimiento.
La movilización social: Para transformar la percepción y generar conciencia sobre la importancia de respetar y proteger los derechos de la niñez y adolescencia en movimiento se necesita trabajar en campañas educativas para generar un cambio cultural que promueva un mayor entendimiento y empatía hacia este grupo.
Los desafíos que enfrentan niñas, niños y adolescentes en movimiento exigen un compromiso conjunto de la sociedad, gobiernos, organizaciones y ciudadanos. Todos somos actores clave en la creación de entornos seguros y acogedores que respeten los derechos y necesidades específicas de la niñez y adolescencia migrante.
¿Cómo puedes ayudar?
Puedes contribuir apoyando a organizaciones que trabajan en la protección de la niñez y adolescencia en movilidad.
En World Vision estamos comprometidos con la protección y bienestar de las niñas, niños y adolescentes en movimiento en cada etapa de su camino. Por ello, nuestros proyectos y programas con enfoque en movilidad tienen los siguientes pilares de atención:
Únete a la causa y ayuda a construir un mundo más seguro y acogedor para la niñez y adolescencia migrante. Tu apoyo puede cambiar vidas. Conoce más en www.worldvisionamericalatina.org